El queso Gruyère No tiene agujeros, lo sabías?
Es un auténtico tesoro gastronómico nacional de Suiza y no de Francia.
Dado que los franceses no producen su Gruyère en Suiza sino en la zona fronteriza, les fue imposible de defender su causa. Es así que los productores galos han tenido que conformarse con la menos prestigiosa etiqueta de IGP (Indicación Geográfica Protegida).
El auténtico queso de Gruyère no tiene agujeros.
El prestigioso queso es de una textura lisa y uniforme, ademas el producto suizo -elaborado con leche de vaca y curado entre 5 y 12 meses- es más salado y su gusto más picante que el del queso francés.
Fuera de Suiza, durante mucho tiempo el término Gruyère era genérico y designaba tanto al queso suizo como a cualquier queso producido en Francia bajo el nombre de Gruyère. Esto incluía al Emmental . Hoy se habla de quesos de la familia del Gruyère, en la cual están englobados los quesos Comté,
Beaufort y Jura.
Un consejo, no todos los Gruyère tienen la AOC suiza, por lo que es importante buscar el sello que lo identifica como tal.
Cata
El queso huele a granja, con un toque a miel y nueces. De sabor parecido al Emmental, posee también fuertes notas a turba y un regusto chispeante.
El sabor es delicado, vigoroso y de pronunciado aroma. Con una nota más o menos salada, los gustos afrutados que dominan pueden variar según la zona de elaboración. El sabor es muy frutal, con una acidez que estimula el paladar. Cuando se aprieta la corteza se puede sentir un sabor similar al vino.
Cuando se corta un Queso Gruyere el aroma que desprende parece el de un millón de flores de la pradera atrapadas en la cremosa leche. Algo granulado, el queso Gruyere tiene una maravillosa complejidad en el sabor, al principio frutal, luego mas terroso y con gusto a nuez, su gusto perdura en el paladar.